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Implicaciones de la pérdida de visión debido a la diabetes

La diabetes es una causa común de pérdida de la visión debido a la retinopatía diabética, el glaucoma y las cataratas. De hecho, los diabéticos tienen un 40% más de probabilidades de tener glaucoma y un 60% más de probabilidades de tener cataratas.

Si no se controla, la pérdida de visión debido a la diabetes es irreversible. Sin embargo, diversas investigaciones afirman que la detección y el tratamiento temprano pueden reducir el riesgo de ceguera en un 95%. En este artículo y de la mano de los especialistas de Clínica Nivaria, te contamos siete datos sobre la pérdida de la visión relacionada con la diabetes que debes conocer:

1. La diabetes daña la retina

Cuando la luz pasa a través del ojo, golpea una capa de tejido llamada retina. Las células aquí son sensibles a la luz y la transmiten al nervio óptico. La retina tiene pequeños vasos sanguíneos que pueden dañarse por niveles crónicamente altos de azúcar en la sangre o presión arterial alta. La retinopatía diabética es cuando estos vasos comienzan a tener fugas o hemorragias, lo que distorsiona la visión. Hay cuatro etapas de esta condición:

  • Retinopatía no proliferativa leve: los microaneurismas en la retina provocan la fuga de líquido de los vasos pequeños.
  • Retinopatía no proliferativa moderada: inflamación y distorsión de los vasos sanguíneos de la retina, lo que puede interrumpir el flujo sanguíneo en la retina.
  • Retinopatía no proliferativa grave: muchos vasos sanguíneos están bloqueados, lo que priva a la retina de sangre y desencadena la liberación de factores de crecimiento.
  • Retinopatía diabética proliferativa: crecen nuevos vasos a lo largo del interior de la retina y dentro del líquido dentro del ojo; son más propensos a tener fugas y se puede formar tejido cicatricial, lo que hace que la retina se desprenda del tejido ocular subyacente. Esto puede causar una pérdida permanente de la visión.

Por lo general, no hay síntomas durante las primeras etapas de la retinopatía diabética y es una de las causas más comunes de pérdida de visión por diabetes.

2. La diabetes causa visión borrosa

El edema macular diabético (EMD) es una acumulación de líquido en la mácula, una parte del ojo responsable de ver de frente. Ocurre en la mitad de las personas con retinopatía diabética en cualquier etapa de la afección. La visión borrosa es el síntoma principal.

3. La retinopatía diabética y el EMD se pueden detectar fácilmente

Estos problemas del ojo diabético se pueden encontrar durante un examen de la vista de rutina. Uno de nuestros oftalmólogos realizará un examen de los ojos con dilatación de las pupilas, en el que evaluará la agudeza visual para medir la visión de lejos y la tonometría para medir la presión interna del ojo. Al dilatar la pupila, nuestro especialista puede examinar visualmente la retina y otras estructuras dentro del ojo. Pueden identificar cambios en los vasos sanguíneos, vasos con fugas o depósitos de grasa, inflamación de la mácula y daño del tejido nervioso.

4. La retinopatía diabética es tratable

Si a alguien se le diagnostica retinopatía diabética, existen tratamientos disponibles en nuestro Centro Oftalmológico ubicado en Santa Cruz de Tenerife para ayudar a prevenir la ceguera, que incluyen:

  • Fotocoagulación: se usa un láser para quemar y sellar los vasos sanguíneos para evitar que la sangre se escape y que los vasos crezcan.
  • Fotocoagulación de dispersión: el láser se enfoca en un patrón de lunares por un profesional del cuidado de los ojos. Se hacen miles de pequeñas quemaduras durante dos o más tratamientos para encoger los vasos sanguíneos anormales.
  • Fotocoagulación focal: se apunta un láser a la mácula para tratar los vasos sanguíneos con fugas. El procedimiento evita que la visión borrosa y otros efectos del edema macular empeoren.
  • Vitrectomía: procedimiento quirúrgico para eliminar el tejido cicatricial y el gel vítreo del interior del ojo. Se usa para tratar el sangrado severo, puede restaurar la visión y se usa para volver a unir la retina.

Para tratar el EMD, las terapias incluyen:

  • Terapia de inyección anti-VEGF: se dirige al factor de crecimiento endotelial vascular (VEGF), una proteína que provoca el crecimiento de los vasos sanguíneos. Este tratamiento puede revertir el crecimiento de vasos sanguíneos anormales y reducir el líquido retiniano.
  • Corticosteroides: inyectar o implantar corticosteroides en el ojo puede suprimir el EMD, pero puede aumentar el riesgo de glaucoma y cataratas.
  • Cirugía láser macular: enfocar un láser en el centro de la mácula puede retardar la fuga de líquido, reducir la inflamación de la retina y complementar la terapia anti-VEGF.

5. Cuanto más tiempo se tiene diabetes, mayor es el riesgo

Cuanto más tiempo tenga diabetes una persona, mayor será su riesgo de contraer retinopatía diabética. Con diabetes tipo 1, las probabilidades son bajas a menos que hayan sido diabéticos durante cinco años o más. Es menos probable que desarrollen retinopatía si el azúcar en la sangre se controla con insulina. La diabetes tipo 2 puede provocar los problemas oculares antes, pero se pueden ralentizar controlando la ingesta de azúcar, la presión arterial y el colesterol.

6. Los diabéticos tienen un mayor riesgo de glaucoma

Una acumulación de presión dentro del ojo, el glaucoma es un grupo de enfermedades. El glaucoma secundario es un problema ocular común asociado con la diabetes e incluye una forma grave llamada glaucoma neovascular. Alrededor de un tercio de estos casos involucran a personas con diabetes. La presión en el ojo se acumula en la cámara anterior, lo que afecta el flujo de líquido que entra y sale de esta cámara. En el caso del glaucoma de ángulo abierto, el líquido drena con demasiada lentitud y la presión resultante puede dañar la óptica.

Las señales de advertencia del glaucoma incluyen dolor en los ojos, halos alrededor de las luces, ojos llorosos, visión borrosa y dolores de cabeza. Un examen de la vista detectará la enfermedad en cualquier etapa. El glaucoma a menudo se trata y controla con gotas especiales para los ojos.

7. Los problemas del ojo diabético se pueden prevenir

Si condiciones como la retinopatía diabética se detectan a tiempo, pueden tratarse. Un examen anual de los ojos con dilatación de las pupilas detectará signos de la afección, incluso si no hay síntomas. Las investigaciones han demostrado que el control de la diabetes ralentiza el inicio y la progresión de la retinopatía, especialmente si los niveles de glucosa en la sangre están bien controlados.

Si tú o algún miembro de tu familia ha sido diagnosticado con diabetes, es imperativo que la condición sea monitorizada para ayudar a prevenir problemas oculares. Contáctanos y pide cita con uno de nuestros profesionales. ¡Recibirás la mejor atención oftalmológica de Canarias! Pide tu cita hoy llamándonos al 822 027 777. Estaremos encantados de atenderte en nuestra Clínica Oftalmológica en Santa Cruz de Tenerife.