Utilizamos toda nuestra gama de sentidos para interactuar con el mundo y cada uno contribuye a la riqueza de nuestra experiencia de vida. Sin embargo, la vista es el sentido en el que la mayoría de la gente confía más. Según diversas investigaciones la mayoría de las personas tienen más miedo de perder la vista que los demás sentidos.
Si perteneces a la mayoría y te gustaría mantener la vista durante toda tu vida, debes conocer una de las principales causas de ceguera: el glaucoma. En este artículo y de la mano de los especialistas de Clínica Nivaria, te explicaremos las causas, síntomas y tratamientos para ayudarte a mantener la vista el mayor tiempo posible.
¿Cómo se produce el glaucoma?
Se estima que millones de personas en todo el mundo padecen esta afección, que se caracteriza por daños en el nervio óptico. Hay varias formas en que el nervio óptico puede dañarse; la más común es cuando se acumula presión interna dentro del globo ocular.
Los tipos más comunes de glaucoma son el glaucoma de ángulo abierto y el glaucoma de ángulo cerrado, que son causados por la presión dentro del globo ocular.
Glaucoma de ángulo abierto
La condición de ángulo abierto se caracteriza por un aumento gradual de la presión que afecta cada vez más al nervio óptico, lo que provoca daño y posiblemente pérdida de la vista. Este tipo suele ser indoloro y los síntomas del glaucoma incluyen pérdida de la visión periférica y visión de túnel en casos avanzados.
Glaucoma de ángulo cerrado
El glaucoma de ángulo cerrado es la segunda forma más común y se caracteriza por un aumento rápido de la presión, lo que puede limitar la capacidad de apertura del iris. Debido a que la presión aumenta rápidamente, es posible que sientas dolor en el ojo, puede haber un inicio repentino de alteración visual o puedes tener malestar estomacal.
Sin embargo, si la pupila se dilata durante un aumento repentino de la presión ocular, puede provocar una situación crítica que puede dañar irreversiblemente el globo ocular. La dilatación de la pupila puede ser causada por gotas dilatadoras durante un examen de la vista o por el uso de gotas para alergias.
Si experimentas dolor en los ojos y notas que los iris de tus ojos son de diferentes tamaños, ¡estos son síntomas de glaucoma que no puedes ignorar! Pónte en contacto con nuestro Centro Oftalmológico en Santa Cruz de Tenerife inmediatamente. Si la presión continúa aumentando, el daño en tu ojo también puede aumentar, lo que puede provocar daños graves y una posible pérdida de la vista.
¿Estoy en riesgo de glaucoma?
Los factores comunes que causan el glaucoma incluyen:
- Edad: con cada año que pasa, tu riesgo aumenta ligeramente. Las personas de raza negra tienen un mayor riesgo después de los 40 años y otros tienen un mayor riesgo después de los 60 años.
- Raza: las personas afrodescendientes padecen mayor riesgo de glaucoma. Los asiáticos tienen más riesgo de glaucoma de ángulo cerrado, y las personas de ascendencia japonesa tienen más probabilidades de desarrollar glaucoma de baja tensión, que puede ser genético o causado por presión arterial baja.
- Antecedentes familiares: si tienes un padre, abuelo, tía o tío que ha tenido glaucoma, podrías estar en riesgo.
- Condiciones médicas: la diabetes, la presión arterial alta y las enfermedades cardíacas pueden contribuir a la aparición del glaucoma.
- Uso de esteroides corticoides: El uso continuado de cortisona, hidrocortisona y prednisona durante períodos prolongados puede poner a algunas personas en riesgo de contraer glaucoma de baja tensión.
- Cirugía ocular incorrecta: si la cirugía de cataratas o los trasplantes de córnea no se realizan correctamente, se puede desarrollar glaucoma.
- Otras afecciones oculares: las lesiones o enfermedades que conducen al desprendimiento de retina, los tumores oculares y la inflamación también pueden ser factores para desarrollar glaucoma. Algunos estudios han relacionado la miopía extrema con un factor de riesgo.
Diagnóstico de glaucoma
Los exámenes regulares de los ojos y la vista son fundamentales para detectar el glaucoma a tiempo. Durante un examen oftalmológico completo en nuestro Centro, uno de nuestros excepcionales especialistas puede realizar un procedimiento indoloro llamado tonometría para medir la presión interna del ojo. Al diagnosticar el glaucoma, nuestro médico también puede medir tu campo de visión y revisar el nervio óptico para asegurarse de que esté sano.
Desafortunadamente, una vez que se detecta el glaucoma, no existen tratamientos que restauren por completo la salud de la vista, pero el tratamiento puede retrasar la progresión de la enfermedad.
Prevención del glaucoma
La primera línea de defensa contra el glaucoma es realizar exámenes oculares regulares con uno de nuestros destacados oftalmólogos. Otra forma de ayudar a reducir el riesgo de glaucoma es tomar medidas preventivas, como usar protección ocular adecuada mientras practicas deportes o usar herramientas y maquinaria que podrían dañar tus ojos.
Si tienes sobrepeso y tu médico cree que los kilos de más están contribuyendo a la diabetes tipo 2, la presión arterial alta o las enfermedades cardíacas, considera reducir tu peso como una medida adicional de prevención del glaucoma.
Tratamiento del glaucoma
Las gotas oftálmicas se utilizan como primer tratamiento, seguidas de un procedimiento ambulatorio llamado Trabeculoplastia Láser Selectiva. Cuando los medicamentos y el tratamiento con láser no son adecuados para reducir la presión ocular, se pueden intentar terapias quirúrgicas, incluida la cirugía de glaucoma microinvasiva que coloca un stent en el sistema de drenaje del ojo.
Si tú o algún miembro de tu familia ha sido diagnosticado con glaucoma, es imperativo que la condición sea monitorizada para ayudar a prevenir un progreso adicional. Contáctanos y pide cita con uno de nuestros profesionales. ¡Recibirás la mejor atención oftalmológica de Canarias! Pide tu cita hoy llamándonos al 822 027 777. Estaremos encantados de atenderte en nuestra Clínica Oftalmológica en Santa Cruz de Tenerife.